No soy ningún apóstol de la virtud, pero estos días algo me ha quedado muy claro, lo que hay que hacer se hace y ya está.
¿Esperar las condiciones perfectas?, ¿qué si llueve?, ¿qué si faltan cosas?, ¿qué no ha salido el sol?, ¿qué somos pocos o muchos?, ¿qué falta dinero? DO NOT PROCRASTINATE!, me dan ganas de gritar a los aficionados a las prorrogas, y a mi misma cuando me he visto envuelta en este lastre.
Hoy llueve -literal-, mañana saldrá el sol -muy probablemente no-, pero no pienso cambiar ni uno de mis planes sólo porque caigan unas cuantas gotas de lluvia. Lo otro es lo fácil, y hace muchos años que me cansé de lo fácil.
He dicho.
Adam Cooper as Don Lockwood in Singin' in the Rain at the Palace Theatre
Photo: Alastair Muir
